Y para este martes tenemos otra secuela que casi arruinó una franquicia, que logró levantarse en la década del 2000, para tener a falta de una, dos secuelas, cual más olvidable que la otra, nos referimos al Exorcista, una de las mejores películas del siglo pasado y por lo mismo, podía seguir siendo estrujada, vuelve Linda Blair a interpretar a Reagan McNeill, quien sigue una terapia para dejar atrás el trauma de la posesión demoníaca que padeció años atrás, recuerdos que reflotarán al ser interrogada por un sacerdote que investiga una acusación eclesiástica en contra del padre Merrin, decubriendo que Merrin era inocente, la identidad del demonio, sus motivos para poseer a cierto tipo de personas y que Reagan no estaba muy traumada por la posesión, en su momento no fue bien recibida y los años no le han sentado bien, recién en 1990 se estrenó una nueva secuela, que además de ignorar la trama del Exorcista II y que originalmente no estaba pensada como una secuela, tras las precuelas, el Exorcista volvió como serie de tv, siguiendo la vida de Reagan como madre una joven poseída y la tensa relación con su madre, es decir, un drama:
EXORCIST II: THE HERETIC (1977)