En el cuadragésimo segundo compacto frikiano cerramos el ciclo de la semana satan con una surtida selección de películas, desde lo curioso a lo "profano":
Inicialmente, este compacto iba a estar compuesto por películas inspiradas en el movimiento new age que comezó a solidificarse tras la caída de la contracultura hippie, despertando el interés en el esoterismo y la magia, lo que se reflejó en el cine tras la "caída" de la casa Hammer y su estilo de terror, reflejándose en numerosas producciones con tramas sobre brujería y cultos satanistas. Pero como somos frikianos, metimos de todo, una antología brasileña, una sobre brujería, una sobre ritos ocultistas y un clásico del cine "blasfemo":
- Trilogia do Terror (1968): Antología ideada por José Mojica Marins (sí, el mismo), que consta de tres historias a cargo de Luis Person, Ozualdo Candeias y Marins. La historia seleccionada para este compacto fue "O Acôrdo", dirigida por Ozualdo Ribeiro Candeias, que para verla hay que pegarse una mafus de verde, natural desde luego, con pocos diálogos, es una volá pasá a algún alucinógeno de la época. Trata sobre una madre que acude al cola 'e flecha porque la hija está enferma y no juega al mete-saca, pero a cambio debe llevar una virgen dentro de tres meses, el señor del tridente le cumple así que está obligada a cumplir, pero un vagabundo que merodea el lugar tendrá algo que decir al respecto, cuando descubran la identidad del vagabundo, además de cagarse de la risa, comprenderán el por qué Trilogía do Terror fue considerada en este ciclo. Ojo que lejos la mejor historia es la del gran "Coffin Joe".
- The Witchmaker (1969): Película sobre brujería ambientada en Lousiana, algo lenta y con unas lagunas con escenas que sólo alargan la película, pero tiene su onda, no hay desnudos y ciertos cortes abruptos dan la impresión que algunas secuencias violentas fueron censuradas. El líder de una secta secreta (identificada con la cruz ankh) se ha dedicado a asesinar y desangrar a atractivas jovencitas que se atreven a adentrarse a nadar en el río, atraído por la presunta motivación sobrenatural en los crímenes, un investigador de lo paranormal y sus colaboradores se dirigen al lugar en compañía de una psíquica, al saber de ella, el asesino se obsesiona con la muchacha y para apoderarse de ella pide ayuda a una antigua bruja. Aunque se empantana en algunas partes, aun es disfrutable.
- Blood on Satan's Claw (1971): No es tan mentor como podría presumirse, pero queda a medio camino del exploitation, como que el director trató pero se le hizo, algo entendible en todo caso, porque varios de los actores parecen ser menores de edad. No es una extraordinaria película, pero es mucho mejor que otras de la época que en el título tienen las palabras "satan" o "devil". ¿De qué trata?, un mocozuelo descubre un extraño cadáver, tras la desaparición de los restos surge una misteriosa criatura que convierte en garras las manos de sus víctimas y paralelamente los jóvenes del poblado comienzan a realizar extraños ritos en las profundidades del bosque (onda druida), tras ser descubiertos por los adultos, Ángel, la púber que lidera el culto, se oculta de la gente del pueblo y se deshace de cualquiera que intente traicionarla o se convierta en un obstáculo para sus planes. A ratos la trama se pierde un poco y ni hablar de zonas pantanosas en el desarrollo de la película, pero sus valores agregados, en especial para los frikianos adolescentes, para ellos está dedicada.
- The Devils (1971): Un clásico de clásicos que en su época dejó la cagá, al punto que dos de sus protagonistas (la actriz que hizo de monja jorobada y Oliver Reed, que interpretó al cura Grandier) tuvieron prohibición de entrar a Italia por un tiempo, que decir de Ken Russell (q.e.p.d.), los católicos todavía lo deben recordar con "cariño". Para el que aun a estas alturas no la conozca, se ambienta en el periodo de las guerras de religión en Francia (entre católicos y hugonotes) y la peste, donde la piedra de tope para que el cardenal Richelieu obtuviera el poder absoluto se llamaba Urbain Grandier, un sacerdote de la diósesis de Poitiers para quien el celibato no era tema, para deshacerse de Grandier, el cardenal se aprovechó del descriterio del delicadito rey francés, la vileza e hipocrecía de los inquisidores, la fama de donjuán y los enemigos que se buscó Grandier, levantándole una falsa acusación de brujería, basada en el testimonio de una despechada monja ursulina (la actriz tiene un parecido con la Alejandra Herrera) y la coerción sobre otras monjas (las endemoniadas de Loudon). Está demás decir que el guión se basa en hechos reales. Esta película es famosamente infame por unas secuencias en las que ciertos símbolos del catolicismo son "profanados", obviamente estarán en el compacto, de hecho, esas escenas son el motivo para la realización de este ciclo y su orden, si no tienen sensibilidad católica o evangélica, el visionado de esta película es un deber, porque el disfrute está asegurado, aunque no es sencillo dar con la versión uncut.
¿Qué quedó afuera?, varias, pero mención especial merece la película The Brotherhood of Satan, una aburridísima película (tal vez lo mejor sea una decapitación) que hace unos años tuvo cierta notoriedad por una ridícula controversia en la que se acusaba a Roberto Gómez Bolaños de ser satanista, en un episodio del Chavo del 8 aparece un afiche de esta película... quien haya tenido la mala suerte de ver este remedio para el insomnio de hora y media, sabrá que más satanismo hay en las películas de Disney que esa fábrica de bostezos, no dio ni para incluirla como bonus track.
Aun no está claro con que temática seguirán los compactos frikianos, tal vez sigamos con el vuelito del cine sobre entes malignos.
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